Si hay algo que me gusta cuando me muevo de un sitio a otro, es poder percibir el sabor de las casas antiguas. Suelos que han pisado diferentes generaciones de una misma familia, y que guardan cientos de historias en sus baldosas.
Eso es lo que me sucedió estos días, visitando la costa levantina, por la provincia de Castellón, y es que me vi envuelta por la historia tangible de una casa en primera línea de playa. Una casa que tiene cerca de 100 años y cuyos dueños se resisten a convertirla en una vivienda sin personalidad.
Apunte: Estas casas, recientemente, han sido salvadas de la quema, gracias a la nueva Ley de Costas española. Muchos vecinos de esta zona, conscientes del patrimonio cultural que representan, defienden incansablemente su permanencia, ya que muestran cómo comenzó a originarse el traslado a las zonas marítimas rurales durante los meses más calurosos en la provincia de Castellón.
Estamos hablando de costumbres que se emprendieron hace más de medio siglo. Esperamos que las siguientes generaciones sigan apostando por la conservación de estas arquitecturas.
Sin Historia no hay futuro.
6 comentarios de “Suelos mediterráneos”
un gran post con una foto genial. Salud !
m’encanten les rajoles hidràuliques !
A veces no nos fijamos en lo que pisamos. Me gusta el blog. Volveré