Asegúrate de que cuando vayan a hacer la web tengan en cuenta lo que quieres conseguir con ella para que la estructura tenga coherencia con tus objetivos
El marketing turístico se ha expandido dentro del universo de Internet hasta tal punto que si tienes un proyecto turístico es necesario que tengas presencia digital aplicando una estrategia y activando diferentes herramientas como newsletters o campañas de Google AdWords.
Pero es importante tener en cuenta que todo ello confluye en una página web que será siempre tu mejor tarjeta de presentación y a la que irá a parar todo el tráfico que generes con estas herramientas.
Todo esto sin tener en cuenta que muchas veces hablo con clientes que creen que la web, una vez está publicada, ya no va a necesitar nada más para tener visibilidad, presencia y buen posicionamiento.
No se dan cuenta de que la batalla más encarnizada comienza justo cuando publicas tu web y tienes que empezar a ganar tu sitio en medio de la jungla de resultados de búsqueda de Google o de cualquier otro buscador, donde las campañas publicitarias de la competencia definirán en parte las pautas que vayas a tomar para la tuya.
También puede que hayas acabado tan exhausto después de todo el proceso de producción de la web que creas que no vas a tener que hacer nada más.
Y tal vez el desconocimiento de todo esto hace que sean muchos los proyectos que caen en manos de agencias que empañan el buen trabajo que se hace en este sector y hagan que se convierta en una auténtica pesadilla todo el proceso de producción de una web.
Agencias de marketing
Es un campo relativamente emergente al que se han apuntado muchos y cada vez veo más conflictos agencia-cliente, ante el desconocimiento inicial por parte del cliente de dónde están los límites legales y qué puede exigirle a la agencia.
Tampoco ayuda el hecho de que sean bastantes las agencias que no cumplen con unas pautas éticas y que pueden acabar convirtiendo todo este proceso en una pesadilla. Incluso para cosas tan básicas como devolver el control de dominios, buzones, archivos o diseños en caso de que se acabe rescindiendo el contrato.
Cada día tengo que lidiar con clientes que desconocen su derecho a conservar el dominio de su web, que vienen de una empresa que se ha quedado con el diseño de su página al rescindir el contrato; que le han diseñado un logo que ha resultado ser un calco de otro cliente y que aparece en su porfolio; que no le asesoran sobre la estructura de su web en todo el proceso de producción; o que no cumplen con la fecha de entrega y les ha tocado estar meses esperando la entrega de su página.
Todas estas incidencias acaban provocando pérdidas económicas que ningún autónomo o pyme puede permitirse asumir, por lo que es de vital importancia evitar caer en ciertos errores que pueden acabar arruinando tus planes.
Así que será el tiempo el que vaya regulando cada vez más unos servicios que son necesarios para la mayoría de empresas o incluso para proyectos personales.
Algunos consejos
Con esto no quiero decir que la experiencia siempre vaya a ser negativa. Hay muchos profesionales en España que actualmente hacen un trabajo excelente, digno y respetuoso con las prioridades y necesidades del proyecto que se les ha encargado. Sólo se trata de que sepas distinguir a unas de otras.
Unas veces nos dejamos llevar por el banner que nos ha saltado en Google o en alguna red social al buscar agencias y otras veces buscamos un poco a ciegas. O incluso le pasamos el proyecto al sobrino/amigo/cuñado/vecino sin saber muy bien cuál es su estilo o su especialidad y si su trabajo acabará cumpliendo con nuestras expectativas.
Así que si andas con dudas tal vez te puedan servir de ayuda algunas pautas para que tu proyecto no se atasque en este punto y que el proceso de la web sea agradable.
Eso sí, ten en cuenta que el diseño es complicado y puede que al principio os cueste un poco a ti y a tu agencia encontrar el punto que estás buscando.
En este caso ten paciencia y muéstrate abierto a las diferentes propuestas o puntos de vista que te puedan plantear. Al fin y al cabo ellos son los profesionales y quienes mejor te van a aconsejar sobre las mejores opciones para tu web.
Así que ahí van algunos consejos que te pueden ayudar a encontrar la agencia que mejor pueda cuadrar con tus intereses y que refleje en tu página todo el universo de tu proyecto:
1. En primer lugar, firma siempre un contrato con obligaciones por las dos partes. Si no nace de ellos pasarte este contrato, pídelo tú desde el principio. Un contrato ampara tus derechos legales a la hora de incumplir los términos del mismo.
2. En este contrato debe figurar siempre una fecha de entrega, plazos o posibles incidencias que puedan provocar que la entrega se retrase. No te creas frases llamativas como que en 15 días tendrás tu web, porque es una falacia, absolutamente imposible y un engaño absoluto. El tiempo razonable (y más si además les encargas el diseño de imagen corporativa y papelería) ronda entre los dos ó incluso tres meses si hay que reajustar algo, y siempre teniendo en cuenta que debes poner de tu parte enviando a tiempo archivos de fotos, textos y prioridades en el briefing que te pasen al principio.
3. No abones al principio más del 20-40% del importe total. A mí me han llegado a pedir el 100% al principio, sin entregar briefing ni haber visto nada del diseño. Nunca caigas en esa trampa. Son importes elevados, que hoy en día no suelen bajar de los 1.000 euros, y si abonas por transferencia bancaria luego te puede resultar un infierno recuperar el importe.
4. Preocúpate de dejar muy claras todas tus prioridades de diseño. Pierde tiempo al principio con el briefing, responde con detalle a todas las preguntas que tengas que rellenar y si te ves perdido déjate asesorar por la agencia. Nadie como ellos para indicarte las mejores opciones.
5. No siempre es aconsejable que la imagen corporativa te la haga la misma agencia, ya que cada vez se especializan más en algún campo de marketing, y normalmente la mejor diseñadora de logos no será la mejor productora de webs. Investiga un poco hasta dar con la que te pueda ofrecer los servicios que mejor cuadren con tu estilo.
6. Importante: asegúrate de que todo tenga coherencia. Tanto si te diseñan la identidad corporativa o el logo, como si sólo les encargas la web, asegúrate de que prestan atención a todo el conjunto y que todo tiene un equilibrio.
7. No pierdas nunca el control de tu dominio. Si encima es el nombre de tu marca y además la tienes registrada, legalmente puedes exigir el derecho a reservar ese espacio en internet. No dejes en las manos de una agencia todo el poder de tu marca, dedica tiempo a ser tú quien lo registre en un servidor y pon siempre como contacto técnico y administrativo tu correo electrónico o uno al que siempre vayas a tener acceso para no perder el control.
Hablaremos más ampliamente de este tema en otros capítulos, pero quédate con una idea: sé tú quien tenga el control del usuario en el servidor que elijas y no permitas nunca que haya intermediarios.
8. Y esto me lleva al siguiente punto: que SIEMPRE te entreguen la web llave en mano. ¿Qué quiere decir esto? Que seas tú el propietario de esa web en todo momento. Eso pasa por haber contratado previamente tú el hosting también para almacenar tu página, donde deberás tener siempre acceso. Y no permitas que te pongan como editor, asegúrate que siempre estás tú como propietario del gestor de tu web. Y esto es extensible a todas las redes sociales, a las que también dedicaremos más espacio en otros capítulos.
También es cierto que a lo mejor no te manejas con el ordenador y se te hace un mundo controlar todo esto. Para ello considera la opción de contratar a una persona que lleve todo el mantenimiento de tu web y tus redes.
Si, por ejemplo, necesitas subir el menú de tu restaurante cada día, o revisar reservas de habitación en tu alojamiento, eso requiere una atención constante.
Y quédate con una idea: no abandones tu web una vez esté publicada. Dedica algo de tiempo a revisar si necesita algún ajuste o actualización.
9. Ten en cuenta que los textos vas a tener que entregarlos tú. Cada vez más las agencias ofrecen un pack de fotos de banco de imágenes, pero los textos siguen siendo más delicados, porque tienen que estar totalmente personalizados. Si no te ves para redactar textos profesionales considera la opción de contratar el servicio de un redactor profesional o copy. Tener unos textos y unos títulos llamativos y hechos con cariño pueden acabar marcando la diferencia entre una web sosa y una que te enganche desde el primer momento.
10. Si la agencia incluye pack de fotos en el precio total de la web, asegúrate que no eligen las que figuran en todos los sites de tu sector, sino que busquen las más personalizadas posible. Es complicado dar con este punto, por lo que no descartes la opción de que un fotógrafo profesional te realice un pack personalizado de fotos de tu local y de tus productos.
11. Si tienes un negocio de hostelería aprovecha estas fotos y prueba con una pequeña e-commerce, una tienda digital, con algunos productos seleccionados, los más exquisitos, y con ofertas especiales que sólo estén en tu web. Atraerás a clientes que de este modo te acabarán buscando por otros servicios o productos.
12. Para conseguir todo esto busca una agencia que te ofrezca un contacto directo y personalizado con la persona que esté diseñando. A veces es un community, a veces es el diseñador. Yo siempre prefiero esta última opción porque ganarás tiempo, al no haber un intermediario que tenga que tomar nota de tus ideas y derivarlas a una tercera persona.
13. Asegúrate de que cuando vayan a hacer la web tengan en cuenta lo que quieres conseguir con ella para que la estructura tenga coherencia con tus objetivos. En ocasiones, si tienes una web antigua, se limitan a copiar la estructura, dentro del nuevo diseño. Y no debería ser así, ya que cuando actualizas una web estás buscando mejoras para posicionarla mejor, y a veces es necesario rehacer toda la estructura y el SEO de la web antigua.
En otros capítulos hablaremos ampliamente del SEO para proyectos de este sector, pero ten en cuenta que siempre va a ser necesario combinar ese SEO con CEO, que son campañas publicitarias de pago, como las Google AdWords.
14. Te lo decía al principio: el tiempo no debe alargarse más de la cuenta ya que corres el peligro de que el concepto de la web se desperdigue y acabará perdiendo toda la coherencia. Lo ideal son unas 6 u 8 semanas. Se puede alargar a unas 12, pero siempre como tope y ante complicaciones en la gestión, siempre por una causa justificable.
15. Al final si todo esto es un jaleo y andas perdido para montar la web de tu restaurante, tu panadería, tu hostal o tu casa rural, también es una buena opción fiarte de la agencia de la que te hayan dado buenas referencias, y si encima su estilo tiene coherencia con el tuyo, mucho mejor. Y el día que des con la agencia que cuadre con tus expectativas, no hagas pruebas por el universo digital, y mantén el servicio con ellos. Si hay cualquier incidencia o necesidad de reajustar o modificar algo, quien te la haya hecho será siempre más ágil a la hora de llevar a cabo cualquier gestión de este tipo.